Es el análisis que se hace a la información a partir de la información que proporciona la contabilidad referida al estado financiero (Balance); económico (Estado de Resultado) y el flujo de caja de la empresa, respecto de un sector específico donde se desarrolle.
El Balance muestra la posición financiera de una empresa, de sus activos, pasivos y patrimonio en un momento del tiempo como es un día determinado. En el caso del Estado de Resultado, muestra el resultado final, que indica cuánta utilidad o pérdida ha generado una empresa en un mes, trimestre o año. Finalmente, el estado de Flujo de Caja, quien señala el efectivo de la empresa y hacia dónde va, que entra, atraviesa y sale.
Entre los indicadores más representativos de este estudio será determinar los niveles de endeudamiento, liquidez, rentabilidad y punto de equilibrio financiero.
El análisis financiero es fundamental para evaluar la capacidad financiera de una empresa, de tal manera de competir, tomando decisiones, elaborando planes de acción e incluyendo la identificación de oportunidades y amenazas del entorno, las fortalezas y debilidades, y la indagación del futuro.
En esta etapa se incluirán las técnicas y herramientas necesarias para el alcanzar los objetivos formulados. Ello implica la realización de:
Corresponde al estudio cualitativo y culminante del análisis, donde para lograr lo anterior se debe:
Estas herramientas permitirán medir la liquidez, los rendimientos y las utilidades de la empresa, a través de la interpretación de las cifras, de los resultados y de la información en general. El análisis es individual, el cual facilita la comparación con la competencia o con aquella empresa que lidera el mercado.
Entre los indicadores más empleados:
La capacidad de una empresa para cumplir sus compromisos y obligaciones con vencimientos a corto plazo. Entre estos indicadores se tiene: razón del circulante, y Razón de Liquidez Inmediata.
Mide la capacidad de la empresa para contraer obligaciones y así financiar sus operaciones e inversiones, y respaldar las mismas con su capital propio, es decir, evalúa la capacidad de responder a sus obligaciones recurriendo a su patrimonio. Entre algunos indicadores se mencionan: Cobertura de Intereses, Relación Deuda/Capital.
Estos indicadores evalúan el nivel de rentabilidad de una empresa expresando las ventas y utilidades como porcentaje de varios otros ítems: Retorno del Activo (ROA), Retorno del Capital (ROE), Retorno sobre las Ventas (ROS), Margen de Utilidad Bruta, Margen de Utilidad antes de Intereses e Impuestos (EBIT).
Miden las relaciones entre el Estado de Resultados y del balance. Estos indicadores proporcionan una evaluación de eficiencia operativa de una empresa: Rotación de Activos, Días Cuentas por Cobrar, Días Cuentas por Pagar, Días de Inventario.
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